Hoy toca SelfieView 🙂 ¿Qué tal familia? ¿cómo estáis?
Parece que por fin empieza a asomar un poco de otoño, porque en cuanto menos nos demos cuenta las luces navideñas nos señalarán el invierno.
Hoy os traigo una entrevista que he preparado a fuego lento, con mimo, con algo más de reflexión tratándose de quien se trata. Pedro J. Ramírez, como todos sabéis, es uno de los hombres más influyentes de este país, un reconocido intelectual que a nadie resulta indiferente. Se podrá estar de acuerdo o no con algunas de sus opiniones o actuaciones pero nadie discute que leerle, poder hablar con él y escucharle es siempre apasionante y enriquecedor.
Tengo que coger el AVE de regreso a casa a las 18.30 horas y he quedado con él a las 16.00 horas, así que salgo con tiempo de mi hotel en Madrid, el Suites Barrio de Salamanca para ser puntual y no perderme ni un minuto del tiempo regalado.
Me dirijo a buscar un taxi cargada de bolsas de compras y mi maleta. Me pregunto si será la mejor manera de llegar al despacho de Pedro J. con tanto bulto ¿qué pensará al verme aparecer así?
Nerviosa, atrevida y con bastante ilusión, me encamino hacia el diario El Mundo, tan vinculado a su biografía. Repaso un poco las preguntas para no tener que sacar la cuartilla donde las llevo escritas, pero luego pienso que tengo que ser yo misma, que por eso estos SelfieView son diferentes.
Una vez en el despacho, ahí estaba él con la fuerza de su personalidad y creo que un poco expectante de lo que yo le pudiese preguntar, precisamente por no ser periodista. Para romper ese hielo que entre ambos no existe, lo primero las fotos que siempre te sacan la primera sonrisa. Al sacar el LG G3 para hacer la foto coincide que él también lo tiene.
Gracias Pedro por atenderme y querer acercar un trocito de ti a mis lectores. Él sonríe encantado y le lanzo la primera pregunta.
R.C.: En esta última edición, ha sido galardonada premio Nobel de la Paz una joven de 17 años que lucha contra la explotación infantil y, sin embargo, no fue TT (trending topic) entre nuestros jóvenes, ¿qué te parece?
Pedro J.: Creo que a veces lo de TT podría decirse que es “Tontin Topic” ¿no? Yo creo que las redes sociales y Twitter, que es la que yo utilizo más, pueden servir para muchas cosas y casi siempre se utilizan como un vehículo de relación personal en el que hay mucha banalidad. También es verdad que pueden ser muy útiles para transmitir cosas importantes. Casi nunca lo importante es lo más difundido en las redes sociales.
R.C.: ¿Qué ídolos tenias tú a los 17 ?
P.J.: (Risas) Yo he sido siempre muy “Kennediano”, sigo teniendo el discurso inaugural de John Kennedy en la pared del despacho y, bueno, me gustaban mucho los cantautores, no sé si a los 17 o a los 19 o así, pero seguro que ya era yo muy fan de Aute y de Serrat. Luego conocí a Aute mucho después, fue vecino mío y un hijo suyo nació el mismo día que mi hijo Tristán, el mismo día, mismo año y sanatorio. A mí me gustaba mucho de Aute, que era de los pocos a los que no se les entendía lo que decía, en una España en la que casi todo se entendía demasiado bien.
R.C.: Dicen que las revoluciones las enciende la ira justa de la gente. Pero luego es muy difícil controlarlas. Tú que sabes de revoluciones, ¿no asusta un poco la violencia verbal en las redes sociales o crees que es solo un desahogo virtual?
P.J.: No se puede ser indulgente con la violencia verbal. El biógrafo de Fouché, Stefan Zweig, en su famosa biografía de Fouché, que es unos de los personajes emblemáticos de la Revolución Francesa, dice que “Empezaron con las palabras terribles y frenéticas y terminaron en las acciones terribles y las acciones frenéticas para darle contenido a esas palabras”. Yo creo que hay que ser completamente intransigente cuando alguien utiliza la agresión verbal como argumento de un debate.
R.C.: Hablando de revoluciones, ¿quién te habría gustado ser de haber vivido en la Revolución Francesa?
P.J.: Pues casi nadie porque a todos les cortaron la cabeza (risas). Bueno, hubo uno que sobrevivió, que precisamente es uno de los personajes que mejor quedan en mi libro y lo digo porque hace un par de semanas he dado una conferencia en Rennes, que es la ciudad en la que este hombre nació. Era un diputado que en España casi nadie le conoce que se llamaba Jean Denis Lanjuinais y fue el orador que se atrevió a desafiar a los frenéticos, a mantener y a denunciar la conspiración que estaba en marcha. Era Breton, y como puedes ver en la foto, en medio de todo el follón del asalto que le ponen una pistola en el cuello, el tío se aferra a la tribuna para defender la dignidad del parlamento, denunciar la conspiración, el hecho de que se esté intentando por la violencia derribar a la mayoría parlamentaria… Fue un hombre verdaderamente digno.
También me gusta mucho la figura del periodista Camille Desmoulins aunque éste terminó mal, lo guillotinó su amigo, compañero de pupitre y padrino de bodas, Robespierre. Era uno de los periodistas mas brillantes del bando revolucionario.
R.C.: En este blog reivindico la visibilidad a partir de los 50, ¿qué podríamos hacer para conciliar lo maduro y lo joven?
P.J.: Yo creo que la vida es siempre la encrucijada entre el pasado y el futuro, creo que no hay ningún proyecto que no suponga de alguna manera un pacto, un punto de encuentro entre la experiencia y, por lo tanto, la serenidad que da la madurez y la audacia, el ansia de innovación que sigue asentando en el corazón de todo ser humano. Cuando me destituyeron como director de El Mundo, yo ya recordé que Indro Montanelli fundó un periódico, El Corriere cuando tenía 64 años, o sea, alguno más de los que tengo yo. Sobre todo les asusté mucho a todos cuando les dije que todavía fundó otro cuando tenía 82 que se llamaba La Notte.
Así que yo ese tópico de que la juventud o la vejez… (risas) Yo conozco a muchos viejos prematuros, conozco a muchas personas que han nacido siendo ancianas, y otros seremos Peter Pan hasta el último minuto de nuestras vidas.
R.C.: ¿Qué proyecto te marcaste a partir de los 50? ¿Lo has conseguido o estas en ello? Los mayores, incluso los de la familia, parece que haya que aparcarlos, que retirarlos (en los artistas, en la política también). Todo ha de ser nuevo, el último móvil, la última tablet... ¿Hay que asumir que va con los tiempos o es un error?
P.J.: Creo que lo mejor es que cada persona, independientemente de su edad, sea capaz de aprovechar el conocimiento heredado y las cosas más vanguardistas. A mí me encanta cuando hay una persona de 70 o de 80 años que lee el periódico a través de su tableta o de su smartphone. Yo creo que todos formamos parte del, “Nadie es una isla en sí mismo”, todos formamos parte del continente y todos tenemos derecho de aprovecharnos tanto de la sabiduría de los que han venido antes que nosotros, como de talento de los que están innovando ahora y la vanguardia de las cosas.
R.C.: A mí me da mucha pena que la gente aparque a los mayores.
P.J.: Ese es uno de los dramas que trae aparejado el desempleo, el paro, la jubilación… Se ha estimulado durante mucho tiempo el que la gente salga del mercado laboral muy pronto. En algunos casos puedes decir; pues mira, ya no hay que trabajar más, tienes tu jubilación y te aprovechas de eso. Pero yo creo que para muchas personas la frustración y la sensación de exclusión está en dejar de sentirse útiles. En tener la sensación de que ya no están haciendo nada más que esperar a que les llegue el final de la vida cuando probablemente, quiero decir, yo me siento más capacitado hoy para dirigir periódicos que cuando empecé a los 28 años, hace 34.
R.C.: Yo sufrí en primera persona un error inocente en un programa de tv, donde me machacaron en las redes sociales. Hoy soy experta en el tema de las redes. ¿Somos inmisericordes con el error ajeno?
P.J.: (Risas) A mí me parece que no hay que tener miedo al error, a lo que hay que tener miedo es a la verdad. Yo creo que las personas fuertes somos inmunes. Si eres victima de un error, de una injusticia, se trata de representarte como quien no eres, si tú estás dispuesto a afirmar tu verdad, lo vas a conseguir antes o después. El problema es que hay personas que se sienten incómodas con su verdad y que lo que no admiten es que se proyecte su realidad. Hay gente que intenta utilizar los medios de comunicación para presentar la parte amable, la cara buena de su realidad y que, sin embargo, ponen el grito en el cielo cuando el periodista o el medio de comunicación saca otras cosas que son verdad pero no les gustan, y hablo de los políticos, hablo de los empresarios, las personalidades del mundo del corazón, del cine o del teatro.
Mi consejo es que cuando veas que alguien dice algo de ti que no es verdad, tranquilo, ya quedará claro que eso es mentira. La verdad puede ser una verdad pequeña, modesta con minúscula… Pero los hechos son los hechos, pero hay una ética de la objetividad.
R.C.: Se celebra en 2015 el V centenario de Teresa de Jesús que hablaba de que “la paciencia todo lo alcanza” y de tener «determinada determinación» en nuestros objetivos… ¿Estamos acabando con las virtudes del esfuerzo, la constancia, la paciencia, del guiso a fuego lento?
P. J.: Es verdad que nuestra sociedad premia y de alguna manera estimula las estrellas fugaces, es decir, construye sus mitos y los destruye a gran velocidad, los quince minutos de gloria casi todo el mundo tiene la capacidad de tenerlos por un motivo o por otro, pero la vida no es eso, la vida no es aquella vez que te sacaron en el periódico por no se qué, la vida es una carrera de fondo y lo importante es ir acumulando tu trabajo y tu tarea día tras día, mes a mes, año tras año porque eso es lo que cuenta. Tanto desde el punto de vista de lo que queda de ti ante los ojos de los demás como, sobre todo, desde el punto de vista de lo que piensas tú de ti ante el espejo.
R.C.: Hablando de guisos y pucheros ¿Cuál es el guiso que mas te gusta? ¿y cuál el que mejor cocinas?
P.J.: A lo último la respuesta es ninguno, porque soy bastante inútil para eso. Puedo calentar un plato o hacer unos espaguetis si están fríos pero hasta para freír un huevo o batir una tortilla tendría dificultades. No solo me pasa con eso, tampoco se arreglar un enchufe. Soy una persona muy poco diestra en las actividades manuales como tal. El deporte no se me ha dado mal, he jugado a baloncesto y ahora juego al pádel que no se me da mal, pero es que no sirvo para ese tipo de cosas.
Mi plato preferido, podría decir varios, pero el otro día en un restaurante en Madrid, me dieron una raya estupenda, la raya me gusta mucho, con alcaparras y trufa negra. Podría decir que me gustan las angulas, pero eso no tendría ningún mérito porque ¿a quién no le gustan las angulas?
R.C.:¿Eres de los que apartas el móvil durante cena o comida?
P.J.: No. Nunca. Lo tengo en el bolsillo. A veces lo apago si estoy dando una conferencia, pero es que para mí el periodismo es una manera de vivir, no algo que tenga que transcurrir dentro de un horario.
R.C.: Tienes 13 hijos literarios. Dicen que a todos los hijos se les quiere por igual, ¿es tu caso?
P.J.: Primero tengo que decirte que no te fíes de todo lo que salga en Wikipedia, porque verás; cuando hace cuatro o cinco años, Ágata y yo con Cosima, nuestra hija, que quería estudiar en EEUU, fuimos a buscar una de las buenas universidades de la costa este. Vimos diferentes universidades, aunque otra cosa era después que la admitieran y entre las que estuvimos una fue Harvard. Nos reunimos con la persona que allí la llaman la “Marshall” de la universidad, que sería aquí como la jefa de relaciones públicas, que enseñaba las instalaciones a visitas que tuvieran alguna relevancia. Estuvimos conversando durante una hora sobre la universidad, lo difícil que era entrar, de distintas carreras, de España…
Al final de la conversación me dice: -Oiga, ya que nos hemos caído bien y que hay cierta confianza, le voy a enseñar una cosa, siempre que viene alguien me preparan un documento sobre esa persona y claro, aquí hay una cosa que no sé… es que aquí, en Wikipedia, dice que usted está divorciado pero que vive con Ralph Lauren.
(Risas) Yo me quedé a cuadros, qué le iba a decir, además nos empezamos a reír y le dije, bueno mire, en realidad es que él nos está esperando a la vuelta de la esquina. Nos echamos a reír.
Pero fíjate, entonces al año siguiente, en un seminario organizado en Londres por Google, coincidí con uno de los “capos” de Google, Barry P. y había puesto como ejemplo de lo que tenía que ser el futuro de la evolución de las redes a Wikipedia y entonces yo conté esta anécdota durante el debate. Claro, se echaron todos a reír después de contarla (estaba el Príncipe Felipe, Haakon de Noruega…) se me acercó el de Google y me dijo; -Oiga, me he quedado muy preocupado y yo puedo tratar de averiguar a través de la IP quién ha metido esa información errónea sobre usted… y entonces le dije; –¡No, por Dios! Preferiría que me presentase usted a Ralph Lauren… (risas)
Es decir, que la inseminación de la información en la red tiene enormes ventajas, pero hay que tener mucho cuidado porque el hecho de que Wikipedia diga que tengo 13 libros no significa nada, de hecho, creo que son 14.
R.C.: 14 libros y ¿cuántos tirantes tiene Pedro J.?
P.J.: No sé, sobre 70 o así. (Risas)
En tono distendido, como durante toda la conversación, nos despedimos para continuar cada cual con sus tareas. Antes de salir, le entrego un pequeño regalo, una piedra del mediterráneo a modo de pisapapeles con su nombre grabado en ella que mi amigo Fernando, deMior Sempiterno,hace exclusiva para él. Quién sabe, tal vez sea la premonición de la primera piedra de su nuevo proyecto.
De regreso en el AVE pensaba en ese periodista que citaba Pedro J. que fundó periódicos a los 64 y a los 84 años. Pensaba en que le había notado con el mismo entusiasmo que cuando le conocí hace muchos años. Reflexionaba sobre que Pedro J., como tanta gente, saben que aún tienen (tenemos) mucho que aportar y que decir.
¿Quién sabe? Tal vez esté comenzando una revolución, nada sangrienta, en la que desde la madurez contribuyamos a hacer este país un poco mejor.
Yo me apunto, ¿y tú?
Feliz semana a todos.
Para esta entrevista mi vestuario elegido ha sido de Mulaya 😉 ¿Que te parece la entrevista a Pedro J. Ramírez?
Remedios
@RemediosMalaga
Buenos días Remedios!He saboreado cada párrafo de la entrevista,Pedro J.siempre me ha parecido un hombre muy interesante,y me encanta todo lo de Agatha Ruiz de la Prada por su estilo y frescura. He disfrutado mucho la entrevista.Un beso,feliz semana!
Buenos días Irene, gracias por tu tiempo.
Es todo un intelectual de nuestro país. Feliz semana.
Buenos días Remedios y enhorabuena por la entrevista!!!!!!!
Preguntas muy inteligentes para respuestas muy inteligentes.
Me las he empapado una a una, y las leeré mas veces para exprimirle todo el jugo, son geniales, de cada respuesta se aprende y se reflexiona.
Siempre me ha gustado mucho Pedro J, me parece un personaje imprescindible para un país. Desde luego en mi casa, hay muchos libros de él.
Siempre le agradeceré que nos haya abierto los ojos y habernos enseñado la verdad de muchos asuntos, y desde aqui le pediría que lo siga haciendo.
Muchas gracias y un besazo grande!!!!!!!
Hola Lola, buenos días.
La verdad es que fue una gozada poder conversar con alguien que sabe tanto y que es tan inteligente.
Todo un aprendizaje charlar con el. No sabría con que frase quedarme después de la conversación.
Por cierto ya tengo el libro que me recomendaste. Ya e contaré.
Feliz semana 🙂
Muerta de envidia por haber tenido esa conversación con Pedro J. Le sigo desde hace muchos años y si levantase otro medio de comunicación tendría seguro muchos seguidores. Te felicito por la entrevista porque es diferente y en la parte que me toca, vinculada a la figura de Santa Teresa, te agradezco la referencia al V Centenario. FELIZ SEMANA
Hola Alicia, buenas tardes.
Lo cierto es que así es, un gran intelectual de nuestro país ciertamente.
Es un hombre brillante al que da gusto escuchar hablar.
Feliz tarde 😉
Buenos días.Que pasada de entrevista.Son palabras sabias y le llegan a uno de optimismo y subidón de adrenalina.Me ha gustado mucho que lo hallas elegido para este lunes y encima a primero de mes,jjajaja.Hay una cosa que no tienes que darle importancia,lo que pasó en ese programa de TV.Por qué paso? Porque estabas allí y nada más.No todos se han ganado a pulso su futuro y poder disfrutar de hacer estas entrevistas.La próxima vez voy yo a los programas para que no pase nada,jejeje.Buen trabajo y feliz semana.
Hola ángel, muchas gracias por lo de la entrevista, lo cierto es que le puse mucho empeño.
Referente al programa tal vez lo cuente en un post te parece? Lo voy a hacer.
Un abrazo.
Buenas de nuevo.Cuéntalo.De todas formas es anecdótico,sin más.Pero tuvo final feliz
P.D.Comenté la semana pasada y no me has contestatado.Bueno otra vez será.Feliz tarde.
Hola mi reina voy a intentarlo otra vez haber si lo puedo mandar,la entrevista de lujo por parte de los dos,yo lo he seguido mucho en debates de tv, y me parece muy interesante y con mucha sabiduría,el lunes pasado te escribí y se te pasaria contestarme,no te lo tomes a mal mi reina,aaaa y lo que te paso en tv tengo curiosidat por saberlo ,feliz semana bonica y cuidate mucho ,Bona nit ,besetssssssss
Buenos días Aurea, gracias.
si que te conteste en el anterior, pero lo que no entiendo es como no ha salido publicado, tengo que mirarlo porque otros comentarios que estaban contestados tampoco aparecen.
Me alegra que te haya gustado la entrevista. Es un gran periodista.
Feliz día bonita!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Hola Remedios,
Que nivel!!
Se trata, sin duda, de uno de los grandes periodistas de este País, un hombre muy inteligente.
Te felicito por la entrevista. Me ha encantado.
Un abrazo
Hola Mamen, muchas gracias. Lo cierto es que el es un gran intelectual.
Un abrazo.
buena entrevista
Buena entrevista pensando en el personaje todo un triunfa Remedios
Hola Manuela, buenos días. el personaje tiene y tendrá una entrevista estupenda en manos de un buen entrevistador. Yo solo me limité a preguntarle y escuchar con atención.
Me alegra viniendo de ti que te haya gustado 😉
Encantadora entrevista, un gran profesional y una gran entrevista.
Enhorabuena