Me gustan tus pies

Nadie prueba la profundidad del rio con ambos pies. (Proverbio)

¿Qué tal estáis familia?  🙂

Me gustan tus pies, cuántas veces no habréis dicho eso al que teníais más cerca, ¿verdad? Pues bien, ahora que pasamos el ecuador de marzo es buen momento para sacar poco a poco nuestros pies de los zapatos y prestarles un poco más de atención.

Hoy lo haré corto, solo quiero explicaros cuatro trucos básicos que podéis hacer en casa vosotros mismos sin necesidad de gastar demasiado. Ni tiempo ni dinero. Aunque quien se lo pueda permitir, de vez en cuando una sesión de pedicura va muy bien. No solo hay que cuidarlos cuando los vamos a enseñar, debemos hacerlo todo el año.

Dicen los médicos que por los pies se cogen muchas enfermedades, y pienso que muchas veces es porque somos inconscientes o no le damos importancia a cosas que hacemos a diario. Por ejemplo andar descalzos que, aunque es muy sano, hay que ser precavido e higiénico.

Muchas veces veo a gente que se queda descalza para pasar el control del aeropuerto y luego tranquilamente se pone los zapatos. ¿Sabéis la cantidad de bacterias que hay en un suelo ajeno a nuestra casa? Pensadlo, yo jamás lo hago, para eso están las bolsitas de cortesía que te dan allí mismo, pero siempre tenemos demasiadas prisas y no reparamos en eso.

A mí me gusta cuidar de ellos los 365 días y tenerlos muy hidratados.

Una vez como mínimo a la semana alternar baños con agua fría y caliente para activar la circulación y darles un poco de vidilla, para que se estimulen. Ellos son los que nos llevan a todas partes, con los que hacemos deporte, andamos, nos apoyamos y sentimos. Son los últimos en salir normalmente cuando nacemos y los primeros que se van cuando a la vida le decimos adiós.

Deberíais tener en la ducha siempre a mano una piedra pómez o una lima especial para los pies, para todas las zonas mas duras y más machacadas, esas que son las que más trabajan. Dentro de la ducha, un par de veces, no tardáis nada en daros un repaso, ellos lo agradecen y lo vais a notar.

Un masaje con un cepillo para el pelo, sí, del pelo que debéis tener solo para los pies, no hace falta comprar nada más. Masajear los pies con un cepillo de púas es muy agradable y activamos también la circulación.

Luego lo masajeas bien con una crema por toda la planta, dedos, empeine y… ¡ Ya veréis como luego os sentís flotar!

Otra de las cosas que hago con frecuencia es un peeling casero al igual que para las manos.

Laváis los pies con agua fría y caliente, después con sal gorda y aceite de oliva bien mezclado lo aplicáis por todo el pie masajeando y por último, al acostaros os ponéis una buena capa de crema Nivea y os enfundáis en ellos unos calcetines de algodón. Dejadlo toda la noche y ya me contaréis qué tal a la mañana siguiente.

¿No os pasa a vosotras que cuando llega el buen tiempo ir sin las uñitas pintadas es como ir desnudas? A mí sí, y por eso no se ir con sandalias y los pies desnudos de esmalte.

Antiguamente y aún hoy, puedes separar los dedos para pintar tus uñas con un simple algodón pero hay en el mercado unas almohadillitas que te los separa con mucha facilidad.

Os dejo foto y el color que para mí siempre da sensación de limpieza. Me gustan mucho los esmaltes de Mavala porque son muy duraderos e hidratan mis uñas. Eso sí siempre con base protectora.

También es importante ejercitarlos en casa, y me explico. Por ejemplo recoger con ellos lápices del suelo, palillos de dientes, pinzas de la ropa… Poneros retos con ellos, eso os dará más agilidad en los dedos y fortaleceréis su musculatura.

Me gustan tus pies, ¿te gustan mis pies? Eso preguntarás al primero que tengas a mano y verás como siempre hay una sonrisa.

Y vosotras, ¿qué trucos tenéis para vuestros pies? Compartidlo.

Queda toda una semana por delante, que la andéis con pasos firmes, seguros y felices

¡Feliz semana!

Me gustan tus pies  😉

@RemediosMalaga