Archicofradía Expiración Málaga

Pregón presentación cartel Semana Santa Archicofradía Expiración Málaga

Buenas noches. En primer lugar quiero saludar a las autoridades presentes.

Al Hermano Mayor, querido Miguel Alfonso, al secretario General Ramón García-Valdecasas y a todos los miembros de la Junta.

Agradecer las palabras de Amando Alonso por su presentación.

Saludar también y felicitar al pintor Salvador Campos Robles.

A todos y cada uno de los hermanos y a todos los presentes,

En definitiva, a la Gran Familia de la PONTIFICIA, REAL, ILUSTRE Y VENERABLE ARCHICOFRADÍA SACRAMENTAL DE CULTO Y PROCESIÓN DEL SANTÍSIMO CRISTO DE LA EXPIRACIÓN Y MARÍA SANTÍSIMA DE LOS DOLORES CORONADA.

¡Cuánto me costó de jovencita memorizar el nombre completo de mi cofradía! Para mí es y será siempre, LA EXPIRACIÓN.

Confieso que me costó aprender ese nombre tan largo, con toda su historia y protocolo dentro, pero sin embargo… me fue tan fácil a esta Archicofradía conocerla, vivirla y quererla…

Es, por tanto, un gran honor, una emoción profunda poder estar aquí esta noche participando de este acto de presentación del Cartel para esta Semana Santa con todos vosotros.

Un momento tan importante para la Archicofradía porque en él, simbólicamente, se anuncia un año más; que la tradición sigue, que la Fe se mantiene, que Cristo muere y resucita

por nosotros, también, en este rinconcito de nuestra Málaga.

Gracias, por ofrecerme la posibilidad de poder recordar en voz alta que mi infancia, que mis primeros pasos por las calles de esta ciudad van ligados a este barrio y a esos colores negro y morado, al terciopelo de nuestros nazarenos.

Y lo puedo hacer esta noche a través de la mirada en este emotivo óleo que será el cartel que anuncie y que nos recuerde por quién estamos todos aquí, como estuvieron nuestros antepasados y estarán tantas generaciones de malagueños.

Estamos aquí por lo que representan los Sagrados Titulares de esta Archicofradía. Nuestro Cristo crucificado y nuestra Virgen de los Dolores.

Contemplarles en su talla o en su pintura es siempre como volver a casa, es verme sentada en un escalón del barrio del perchel, en concreto de calles aledañas a la Plaza de San Pedro, comiendo una gran manzana de caramelo junto a mis padres cada miércoles Santo.

Y desde entonces hasta ahora, mirarles en sus tronos, orar ante ellos, confiarles miedos o darles las gracias es sentirse protegida, resguardada, amada, arropada… es… encontrar el hogar.

Porque el sabor dulce de aquella manzana infantil, tan lejana de la de nuestros primeros padres, el olor a incienso, la música, la representación de los caballos, el tacto de la cera, la Guardia Civil tan vinculada a mi familia y , por supuesto, la majestuosidad de los tronos, del Cristo de la Expiración y la Virgen de los Dolores hicieron que aquella Remedín, comenzara a sentir la pasión de la Semana Santa de Málaga que esta Remedios nunca ha perdido.

Por eso es tan importante que la Fe abarque todos los sentidos, la vista, el olfato, el gusto, el oído, el tacto. Por eso hay que darle la importancia que merece a esta obra de Salvador Campos Robles porque lo que representa es grande y en cada mirada que le roce habrá sentimiento, seguro que despertará en el corazón de mucha gente ese instante de memoria colectiva, de emoción, de oraciones mentales y vocales, de promesas o acciones de gracias, de afecto, de protección… de vuelta a casa.

Porque ahí está Jesús que a pesar de los tormentos y agonía pronuncia las más bellas palabras de amor y nos consuela entregándonos a su madre…

Nuestra Madre, María… que en la advocación de la Virgen de Los Dolores tiene traspasada el alma porque sabe que los culpables de su sufrimiento son los pecados del mundo.

Pero a través de ella, que contempla amorosa a su hijo, se nos revela como bálsamo de salvación, consuelo de tristezas e intercesora ante Él.

No puedo evitar recordar a mi madre en ella, que también me dio grandes enseñanzas en ocasiones desde el dolor pero que también era sobretodo alegría, consuelo y guía.

La primera vez que me uní a los penitentes, acompañando a María Santísima de los Dolores Coronada, si la memoria no me traiciona eran los años 70. Portar aquella vela y soportar sobre mi frente la presión del capirote me hizo ver a la otra Málaga.

La Málaga en Semana Santa que la espera, la que toma el bocadillo antes de que Ella pase, porque a le gusta salir a las doce, a la hora mágica de las princesas. En la transición de un día al siguiente porque, María, no lo olvidemos, es también esperanza.

Procesionando, observaba a esa Málaga de tradición, de símbolos que nos hacen únicos porque para Dios somos cada uno de nosotros irrepetibles, especiales, preferidos.

Esa autenticidad y singularidad también la refleja con fuerza el Cartel que hoy presentamos.

Con ese representante del Cuerpo, de nuestra Guardia Civil que también nació para servirnos y protegernos de otros males. Que también nació para cuidar personas y paisajes. En definitiva; un instrumento más del Creador para velar por su obra.

Y en este viaje por mis recuerdos que gracias a vuestra invitación y a las evocaciones que este magnífico cartel me inspira, puedo compartir esta noche .. Un especial regalo me tenía preparado el Destino o nuestra Madre para que desde lo más íntimo a lo más mundano estuviese siempre vinculada a esta Archicofradía.

Un día de San Francisco de 1986, un importante diario de Málaga abrió sus páginas titulando así: CORONAS PARA UNA VIRGEN Y UNA MISS.

Nuestra sagrada titular fue coronada el mismo día que me coronaron Miss España. Una coincidencia, que aunque pudiese sonar frívola para algunos, para mi suponía un honor compartir aquel reportaje porque sentí que, una vez más, en cada momento importante de mi vida, ahí estaba ella, acompañándome, protegiéndome, velando por mí.

Una vez más, aunque aquel momento sabía que iba a suponer viajes, distancias y ausencias… Ahí estaba y estaría ella, para hacerme sentir en casa.

El ramo de rosas que recibí aquella tarde lo puse a los pies de su trono. Siempre le he tenido mucha fe a mi Lola perchelera, le he pedido por mi gente y ayuda para caminar con fuerza ante la vida.

Amigos, amigas, hermanos.

Esta noche estoy yo aquí en esta tribuna, pero cualquiera de vosotros o de cientos de malagueños podría estarlo. Cualquiera de quienes hayan sentido y vivido nuestra Semana Santa y hayan estado vinculados directa o indirectamente con estos pasos y a este barrio.

Y en cierto modo lo haréis, lo harán. Porque cualquiera de vosotros o de nuestros vecinos al contemplar el cartel, podrán compartir ante otro auditorio; familia y amigos, momentos como los que yo le he contado. Tal vez experiencias más intensas espiritualmente o más coloristas humanamente, pero transmitiendo lo que en definitiva hace verdad y que cobre vida, un óleo, una imagen.

Como les decía al inicio, lo más importante, lo central de lo que nos reúne, también es central en la pintura elegida como mensajera de lo que representamos y difundimos.

Cristo. La matriz de la que nace nuestra Fe. La esencia de lo que conmemoramos en esa semana de pasión que pronto será pregonada y que culminará con lo que le da sentido. La Pascua de Resurrección.

La expresión de la Fe del pueblo, de un barrio, de una ciudad, como es nuestra Archicofradía se ha de anunciar con expresiones de belleza y sentimiento, con el rigor artístico de la que hoy presentamos y por la que de corazón felicito a su autor.

Anunciar, pregonar, difundir…esa es su misión y la cumple con creces.

Una amiga, vinculada a la Orden de Carmelo, me descubrió una enseñanza hermosa de la Santa de Ávila que también hablaba de proyectar nuestra Fe. Decía Santa Teresa ; “ En tiempos recios, amigos fuertes de Dios”.

Seamos pues, más que nunca, con este cartel y con esta afirmación pública de nuestras creencias anunciando la Semana Santa y la Pascua, los mensajeros para hacer una llamada al barrio, a los malagueños y visitantes a compartir estos días con nosotros, como experiencia interior y como experiencia colectiva irrepetible….

No podemos conservar solo para nosotros la alegría de la Fe; para que ésta pueda permanecer en nosotros, tenemos que compartirla, que transmitirla, que pregonarla.

Así conseguiremos, aportando cada cual la luz de nuestra vela, que siga habiendo durante generaciones muchas niñas, muchos niños que sentados en algún escalón del barrio, saboreando una manzana de caramelo; descubran a nuestros nazarenos, huelan el incienso, sientan la música, contemplen la representación de los caballos… y ¿ Quién sabe? Aunque les cueste un poco aprenderse el nombre de nuestra Archicofradía, cuando vean al Cristo de la Expiración y a la Virgen de los Dolores Coronada… ya sea sobre un trono , en el templo o en un cuadro… se sientan cuidados y protegidos, se sientan amados… Se sientan… como yo esta noche, se sientan en casa.

Muchas gracias.

Aunque sin duda nos veremos, aprovecho para desearos Emotiva Semana Santa y Feliz Pascua de Resurrección a todos.

Remedios Cervantes. (@RemediosMalaga)

Malagueña y perchelera.